Aunque sabe apañárselas muy bien sola, Virginia Applejack se ha instalado por unos días en casa de su tía Jane, que tiene demasiado tiempo libre desde que el tío Jack dejó la medicación, se instaló en el garaje y se sumió en un estado catatónico. Eli les hace recados. Según tía Jane, Eli es el chico más guapo de todo el condado de Worcerster, por no decir de todo el estado de Maryland. Su madre es una bruja posesiva y manipuladora y su padre murió en un sospechoso accidente. El chaval lleva consigo un tremendo equipaje emocional y en una ocasión se apuñaló un pie. Tanto él como Virginia tienen claro que si no estuvieran tan jodidos tal vez serían más felices pero más aburridos. Ahora Dedos tiene un negocio para Virginia. Dedos se llama Dedos por algo, no lo olvidemos. La sensación general, en cualquier caso, es que de aquí nadie va a salir vivo.
Reseña de la editorial