La profecía ha fracasado, ya no hay nada que pueda detener a los Sheks.
Ahora más que nunca el destino de Idhún está en manos de Victoria. Y sin embargo, la luz de sus ojos se ha apagado: solo emanan una profunda oscuridad.
Victoria sabe que está sola en la batalla, y que debe salir con vida por el bien de los suyos, pero ¿acaso se puede vivir con medio corazón?
Reseña de la editorial